martes, 5 de mayo de 2009

ODA AL PERRO QUE SIEMPRE QUISE TENER.





Cuando apoyo mi pié cansado sobre el suelo,
y es la hora de la siesta en verano,

a veces noto el aire que desplaza tu cuerpo,

miro entonces y pasas a mi lado.

Siempre con tu aire desenfadado,

siempre ojos tiernos y hocico cercano,

siempre bien alto el rabo.

Me miras y te miro,

y sonries con la lengua mientras yo sonrío de lado,

y te digo:

"Lulú on the bridge, al fin has llegado"

SAL Y ESTRELLAS: UN MICROCOSMOS CERCANO

Bienvenidos a Sal y Estrellas, un espacio de encuentro en la Red y una ventana al microcosmos de las Comarcas del Mar Menor y Cartagena.


La Costa Salada os aguarda...